Estos momentos de “no sociabilización “se acusan especialmente en los mas jóvenes. Además de no poder asistir a sus clases, de un momento a otro, se ven obligados a suprimir sus salidas y los encuentros con sus amigos. Para ellos, no resulta sencillo, y muchos piensan que esto “no va con ellos “
Por eso, es sumamente importante que entiendan bien la situación, gran parte de su negativa a permanecer en cuarentena, viene determinada por su desconocimiento. Dedica un tiempo a explicarles bien el porqué de estas medidas y la importancia de que todos cumplamos con ellas.
Concédeles espacio y se comprensivo con su enfado y su frustración, pero ayúdales en lo que puedas a canalizarla y a buscar recursos que puedan paliar esa falta de vida social durante el tiempo de crisis.
Permite que mantengan el contacto vía telefónica u online, pero siempre con un control de los tiempos, ayúdales a encontrar actividades reconfortantes y estimulantes para ellos.
Respeta también sus espacios, y trata de equilibrarlos con actividades familiares.
Escucha sus emociones sin juzgarles, eso hará que sientan que son válidas, pero no cedas ante sus impulsos o ante su negativa a permanecer en casa. Es importante ser firme, pero a la vez, flexible y comprensivo, a fin de evitarles una mayor ansiedad y desconcierto.