NeuroEvaluación Atencional

En Orientak, trabajamos mucho con personas con TDAH. Sobre todo, niños y niñas. Nos hemos especializado durante más de 10 de trabajo en este trastorno.

Por ello, en la actualidad, contamos con un mecanismo de última generación para poder evaluarlo. Se llama NEA (NeuroEvaluación Atencional).

Es apta para todas las edades, y no tiene efectos secundarios ni se proporciona ningún tipo de medicamento para realizarla.

Consiste en que la persona tiene que estar cómodamente sentada. Seguidamente, se le colocan las gafas 3D y unos casos. La persona tiene que estar completamente aislada para que la evaluación sea cien por cien efectiva.

Dependiendo de la edad de la persona, el escenario de la prueba, será diferente. En este caso, hablaremos del escenario para menores de 16 años.

Cuando el NEA se lo hacemos a menores de 16 años, el escenario es una clase de colegio, en la que está sentado en un pupitre y están los compañeros y el profesor. Consta de cuatro actividades. Con un pulsador que la persona tiene a su alcance, tiene que apretarle cuando tenga que descartar la palabra o la imagen que se le haya dicho. O, por el contrario, para clasificar las palabras.

Además de todo ello, hay elementos distractores cómo compañeros que hablan a su alrededor, risas, ruidos de ambulancia, pitidos de coches, llamadas a la puerta del aula, etc. Por el movimiento que la persona hace con la cabeza y a través de del neurofeedback, se puede comprobar la atención que se tiene en la actividad, o si está pendiente de lo que está pasando a su alrededor.

Después de realizar la prueba, obtenemos un informe. Con él, podemos apreciar a la perfección si existe o no en la persona el trastorno por déficit de atención e hiperactividad. Ya que nos muestran gráficas de un cerebro normalizado comparándolo con el de la persona que acaba de realizar la evaluación. A ello, le sumamos que realiza también una foto del cuadro de la concentración y de la atención que el cerebro tiene para poder observar si los elementos distractores han cumplido su función, o la persona estaba tan concentrada que no la han distraído.

Gracias a NEA, muchas familias han podido entender el comportamiento de sus hijos de una manera rápida y eficaz. Y nosotros, como profesionales, podemos trabajar con ellos en una dirección correcta y acertada.